Acuariofilia

Un hobby que me atrapó, y todavía no me explico cómo, es el tema de los acuarios. Yo siempre había dicho que ni siquiera los peces me caían bien pero todo empezó gracias/por culpa de mi amigo Alfonso, antiguo vecino de mis sobrinas y gran aficionado que llegó incluso a reproducir con éxito nuestro amado pez disco.

Alfonso tenía un acuario en casa al que teníamos que hacer visita forzosa cada vez que pasábamos por su puerta para que las niñas diesen de comer a los peces. Esto me llevó a pensar en regalarle a Yami, la mayor un acuario de unos 30 litros con tres o cuatro Guppies, para ello empecé a investigar en Internet y a preguntar por las tiendas, y me empezaron a hablar del ciclo del nitrógeno, del PH, de la dureza del agua y mil cosas más.

Esto desembocó en que para regalarle el acuario a mi sobri necesitaba tenerlo funcionando desde un mes antes en mi casa, para lo cual preparé un espacio en la habitación desde la que trabajo habitualmente.

Llegó el día de darle el regalo y claro, ese sitio me quedó vacío, y la verdad es que el acuario de la niña quedaba bonito allí así que manos a la obra decidí hacerme yo un acuario a medida para ese espacio.

Tuve el acuario allí algo menos de un año, cuando ví que una pareja de escalares que había comprado muy pequeñitos había hecho una puesta picándome la curiosidad. Evidentemente no fueron capaces de sacarla adelante por el escaso espacio que tenían y la molestia del resto de peces. Tras dos o tres puestas continuadas decidí comprar un acuario pequeño, de 60 litros, para ver si conseguía separar la puesta y criarla de manera artificial, tal y como recomiendan y enseñan en múltiples webs. La cosa es que de la primera puesta salieron más de 100 alevines que pronto crecieron y tuve que comprar un acuario mayor.

A su vez una pareja de Ramirezzis también sacó adelante otra puesta con lo que me junté con otros 40 o 50 pequeños pececillos que no quería dejar morir, con la consiguiente necesidad de espacio.

En un frenesí reproductivo una pareja de ancistrus también sacó adelante otra puesta y como tenía espacio fuí a la tienda, en la que ya me conocían, je, y compré otro acuario de 120 litros.

En ese momento decidí, con la ayuda de Alfonso, el responsable/culpable de esta historia, construir un acuario de fibra de vidrio para decorar la bodega y esto no llevó más que a más y más alevines, con lo que desemboqué en una instalación de unos 10 acuarios de diferentes tamaños para sacar adelante los alevines más el de exposición.

Espero poder ir ofreciéndoos consejos poco a poco sobre mis experiencias en este bonito mundo de los acuarios y comentar los buenos, y muchas veces frustrantes, momentos que me hace pasar.

De momento, si sentís curiosidad, os dejo un video de mi acuario más grande (400 litros) en la página de Hobbies del blog.

Un saludo.